La disputa del Barça-Nápoles del próximo miércoles con total normalidad ya está en entredicho. Según adelanta ‘L’Esportiu’.
La Generalitat de Catalunya quiere que el partido de vuelta de los octavos de final de la Champions entre el conjunto azulgrana y el napolitano se dispute a puerta cerrada por temor al coronavirus.
Hay que recordar que el partido de este martes entre Valencia y Atalanta, también de la Champions, ya ha sido decretado a puerta cerrada, mientras que el PSG-Dortmund del miércoles también podría disputarse sin público en el Parque de los Príncipes.
En los últimos días ya se ha pospuesto en la capital catalana la celebración de la Marató, que se debía disputar el 15 de marzo y ha sido fijada ahora para el próximo 25 de octubre.
El FC Barcelona no ha recibido por ahora un comunicación oficial y se mantiene a la espera.
En el caso de jugarse el partido sin público, el impacto económico sobre la taquilla sería relativamente importante.
Al margen de los billetes que algunos aficionados hayan podido adquirir por su cuenta a través de los diferentes canales de distribución, como el ‘Seient Lliure’ (Asiento Libre’), hay que tener en cuenta las alrededor de 5.000 entradas que compraron los seguidores del Nápoles.
En cambio, no habría afectación a los ingresos por los derechos audiovisuales y de imagen, que a día de hoy son una parte estratégica de los presupuestos de los clubes, pues el partido sería emitido por televisión con sin problemas.
Según la información, la medida de puerta cerrada afectaría a los aficionados pero no a los profesionales de los medios de comunicación ni a los integrantes de los diferentes colectivos profesionales implicados en la celebración del partido.
La decisión de que el encuentro se dispute a puerta cerrada iría en consonancia con las medidas que han ido tomando de manera paulatina las autoridades.
Mientras que en Valencia ya se disputó sin público el partido de la Euroliga de baloncesto Valencia Basket-Armani Milán, para este martes está programado que el Valencia-Atalanta de la Champions de fútbol se juegue en Mestalla sin público, en consonancia con otras medias tomadas en el resto de Europa. Así, el Getafe-Inter o el Roma-Sevilla también se disputarán a puerta cerrada
En Barcelona, el ayuntamiento de Barcelona anunció el pasado sábado aplazamiento de la maratón como prevención para contener la expansión del Covid-19.
La decisión fue consensuada por las autoridades consistoriales junto a los responsables de la Secretaría General de l’Esport de la Generalitat, las consejerías de Salud e Interior, y la Agencia de Salud Pública de Catalunya.
Estas mismas autoridades estarían evaluando los detalles para decidir de manera definitiva la decisión y comunicársela al FC Barcelona.
En Italia, uno de los focos más importantes de la epidemia, se disputaron los partidos de la jornada de la Serie A a puerta cerrada aunque las indicaciones eran de suspender su celebración; una medida que se podría tomar esta semana de manera definitiva.
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