Arte y fe desborda las galerías del mirador turístico de Santa Rosa

A pocos metros de la plaza Bolívar, frente al Santuario de Santa Rosa donde se ubica la imagen de la Divina Pastora, se encuentra el mirador turístico, un espacio destinado a la distracción y al esparcimiento, de propios y visitantes.

Arte y fe, sin duda alguna son las palabras que definen a los artesanos del mirador del pueblo de Santa Rosa. Piezas talladas en madera, cuadros, medallitas, imágenes modeladas a mano, diversas ilustraciones de la Virgen Divina Pastora, son parte de los “souvenirs” realizados por los artesanos que le dan vida a las galerías del mirador.

El artesano Rafael Cibrián es el artífice de “El Conuco del Arte”,  un espacio inspirado en la fe y devoción del  artista a la Divina Pastora. Se dedica a elaborar y ofrecer a los turistas y propios un presente para que se lleven un recuerdo grato del pueblo. Tiene 16 años trabajando en las galerías del mirador. “Sembramos arte para cosechar amor” es el lema que define su pequeño rincón artístico.

A pesar de que las ventas de sus artesanías bajaron a un 80%, Cibrián se mantuvo con más fe cada día creando obras inspiradas en la Excelsa Patrona de los larenses.  “Lo más importante es que tenemos la protección de la Divina Pastora, de ella no estar aquí otra cosa sería”. Hoy es una gran realidad el pueblo y los habitantes de Santa Rosa se han transformado para bien.

Su musa es la Divina Pastora. “Es increíble cómo estos días se siente una energía diferente, y hace que nuestra creatividad aflore”.  Luego de dos años de pandemia, y con poca afluencia de turistas, los artesanos se preparan con los brazos abiertos para recibir a quienes deciden realizar turismo religioso.

Cibrián es el creador de la obra que se encuentra bajando las escaleras del mirador. “Al inaugurarse el mirador sentí que hacía falta algo que atrajera a los visitantes a esta zona. Recuerdo perfectamente la fecha, comencé un 11 de agosto con la obra en arcilla y barro”.

Por un sinfín de inconvenientes, hubo un momento donde se vio sin recursos para avanzar y es donde sintió que la virgen intercedió  “Siempre estuvo presente la fe, cuando me vi sin recursos llegó un señor de la nada y me apoyó para culminar la obra” así lo recuerda Rafael mirando al horizonte.

¿Quién no se ha tomado una foto en este monumento del mirador?

LA VIRGEN SE VA, NOSOTROS NOS QUEDAMOS

El Rincón de La Pastora es otro de los espacios de las galerías artísticas del mirador. Está integrado por “los Arroyo”, una familia que tiene más de 45 años trabajando la artesanía dedicado a la Divina Pastora. Cuentan con variedad de productos para recibir nuevamente a los temporadistas quienes se reencontrarán en la visita 165 de la Patrona de los larenses.

“EL RINCÓN DE LA PASTORA” surge de una iniciativa propia de Marcial Arroyo, quién comenzó en un pequeño rincón de la ciudad y todos los trabajos eran inspirados en la Excelsa Patrona (de allí surge el nombre). El legado lo traspasó a sus hijos y nietos, quienes día a día continúan trabajando para la virgen.

“Nosotros nos encontramos prestando el servicio todo el año, la virgen se va y nosotros quedamos” afirmó Arroyo.

Marcela Arroyo tiene 15 años, y nos cuenta que desde que tiene uso de razón recuerda haber paseado y jugado en los pasillos del mirador “Mis padres tienen este local desde que yo estaba en la barriga de mi mamá”.

Patricia Pérez, madre de Marcela, se siente muy orgullosa de realizar diferentes artes para quienes lo visitan y deciden compartir su fe para llevarlo a cada rincón del país y también fuera de nuestras fronteras. “Estamos muy contentos que este año vuelve a las calles, a llenarlas de amor, fe y alegría”.

Más que para el comercio los Arroyo dedican sus artes para compartir la fe y el amor que sienten hacia la pastorcita, “Gracias a Dios y a la Divina Pastora tenemos el Milagro de estar vivos”. Lo que le piden a la virgen cada vez que sale es que los siga protegiendo y llenando las calles de amor.

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UNA VENTANA ARTÍSTICA

Cristina Sánchez, es creadora de “Kprichos”, una ventana artística del mirador que tiene 12 años dedicadas a la Santa Madre Divina Pastora. Sus piezas son moldeadas totalmente a mano.

Una de las palabras que mejor define a Sánchez es el compartir, sus vitrinas están a la disposición de otros compañeros artesanos que se dedican a la creación de las diferentes imágenes de la Divina Pastora y que no tienen  donde mostrar sus trabajos, “mis estantes están a su disposición”.

Sánchez ha sentido la presencia de la virgen desde muy cerca, nos relata que hace algunos años su tía, quien era una de las costureras de la Divina Pastora, tuvo un accidente donde se dislocó el brazo, “Mi tía Aida Torres, le pidió a la virgen que si quería que le siguiera cosiendo sus vestidos, le ayudara a sanar su brazo” al poco tiempo la señora continuó realizando los arreglos a los vestidos de la virgen, sin necesidad de operación.

EL RINCÓN MÁS DULCE DEL MIRADOR

Otra de las opciones que puedes encontrar en el mirador turístico, son los espacios gastronómicos. “Dulce Fátima” es el rincón más dulce del mirador, atendido por sus dueños quienes principalmente tienen para ofrecer un “Cariño totalmente cálido”, asimismo diferentes dulces típicos de la región, tortas, helados, fresas con crema, y mucho más… Que pueden disfrutar con la hermosa vista al Valle del Turbio.

Su fe y su devoción mariana los mantiene activos trabajando en cualquier época del año. Quienes le dan vida a estos espacios coinciden en que sigan visitando el mirador turístico, sus galerías están abiertas todos los días del año y los esperan con los brazos abiertos, para que se lleven un lindo recuerdo de Santa Rosa.

Oriana Lorenzo / Noticias Barquisimeto