A pesar de la falta de medicamentos, farmacias comunales prevalecen

Venezuela atraviesa por una crisis política y social, y en este caso la búsqueda de medicinas se hace cuesta arriba, y es por ello que un grupo de mujeres en una zona popular de Caracas, en compañía de un médico chileno lideran una estrategia para la distribución de medicamentos.

En la casa de Manuela Gutiérrez, funciona el Consejo Comunal Coromoto de Dios, donde se inicia el plano sin cortes de esta historia que empieza horas antes de la inauguración de una farmacia comunal en los Altos de Lídice, reseñó RT.

Por otro lado, la joven Betsy Rebolledo, de 26 años de edad, perteneciente al Consejo Comunal Poder y Unión, y que integra la Mesa de Salud y Protección Social trabaja junto a 19 mujeres más que juntas conforman la Comuna Altos de Lídice, ubicada en La Pastora.

Rebolledo se encarga de los medicamentos y de colocarlos en orden para que sean distribuidos a las personas, previamente revisada la lista de prioridades.

Por su parte, Roberto Bermúdez, médico chileno, dice que han recibido 311 presentaciones de medicamentos, producto de una colaboración internacional gestionada por la comuna.

Además indica que tras un viaje a su país natal, logró “amarrar muchas voluntades”, y que esto “le permitió que desde hace dos meses les lleguen donaciones regulares“.

Entre la lista de medicamentos que prevalecen en este proyecto son de origen neuropsiquiátricos, analgésicos y antiinflamatorios, para el colesterol y la diabetes, para tratar cardiopatías y diuréticos, antibióticos y antifúngicos, antialérgicos y antiinmunológicos, gastrointestinales y suplementos, y ginecológicos.

RT