El miedo a los nuevos temblores, conocido como tremofobia, es una respuesta natural del cuerpo ante eventos sísmicos que nos hacen sentir vulnerables e impotentes. Si bien es normal sentir temor después de un sismo, este miedo se vuelve patológico cuando es excesivo, persistente y afecta la vida diaria de una persona.
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La psicóloga Conchita Torres, comenta que el miedo a los temblores e incluso los de baja intensidad, se debe a que nos enfrentan a la falta de control, activando una respuesta de alarma cerebral que genera ansiedad, palpitaciones y hasta pánico. Este miedo es normal, pero si persiste, puede volverse un problema.
Recordamos que durante la tarde del miércoles 24 de septiembre y la madrugada del jueves 25, en el occidente del país, se produjeron más de 6 temblores, de los cuales Barquisimeto fue uno de los epicentros, luego que el estado Zulia registrara el primer sismo a las 5 de la tarde. FUNVISIS informó que el primero se originó en Bachaquero, exactamente a las 5 y 20 pm, sin embargo, en el transcurrir de la mañana de hoy, la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas reportó a las 7 y 28 am otro sismo de magnitud 4.3.
¿Por qué los temblores, incluso los de baja magnitud, generan tanto miedo en la población?
R: Porque nos enfrentan a algo que no podemos controlar. Aunque sean leves, activan una respuesta de alarma en el cerebro, especialmente en la amígdala, que detecta peligro. No solo es el movimiento, sino lo que representa: la posibilidad de que ocurra algo mayor. Por eso, aunque racionalmente sepamos que fue pequeño, el cuerpo reacciona como si estuviera en gran riesgo.
¿Es normal sentir ansiedad o pánico después de un evento sísmico?
R: Sí, es completamente normal. Durante un temblor, el cuerpo libera adrenalina y cortisol, generando ansiedad, palpitaciones o incluso ataques de pánico. Estos síntomas suelen durar entre 24 y 72 horas, pero si persisten por semanas y afectan el sueño o la vida diaria, es importante buscar apoyo psicológico.
¿Cómo afecta la incertidumbre de no saber cuándo ocurrirá el próximo temblor?
R: La incertidumbre mantiene al cerebro en estado de alerta constante. Esto puede provocar insomnio, irritabilidad, ansiedad y tensión física. Cuando se prolonga, afecta la salud emocional de toda la comunidad, generando un ambiente de miedo colectivo.
¿Cómo la repetición de temblores puede generar un trauma colectivo?
R: Cada nuevo temblor reactiva la memoria emocional de los anteriores. Esto crea un trauma colectivo, donde el miedo se comparte socialmente. Con el tiempo, influye en la forma de hablar, los hábitos y la manera en que la comunidad se organiza, priorizando siempre la seguridad.
¿Cómo pueden los padres ayudar a sus hijos a manejar el miedo?
Validando sus emociones: “Entiendo que tengas miedo”.
• Dando información sencilla y clara según su edad.
• Practicando simulacros en familia para que sepan qué hacer.
• Manteniendo la calma, porque los niños aprenden al observarnos.
• Permitíéndoles hablar, dibujar o jugar para procesar lo vivido.
¿Qué papel juega la información y la desinformación?
R: La información confiable calma, porque nos da un plan de acción. En cambio, los rumores y noticias alarmistas amplifican el miedo y pueden generar pánico colectivo. Por eso es clave informarse a través de canales oficiales y evitar compartir contenido no verificado.

Mensaje a la población de Barquisimeto
“El miedo es natural, pero podemos transformarlo en prevención. Preparar un plan familiar, un bolso de emergencia y conocer rutas de evacuación nos da seguridad», destacò la entrevistada
«También podemos entrenar la calma: respirar profundo, seguir los pasos practicados y recordar que estar preparados nos hace sentir más fuertes que el miedo. Barquisimeto es una ciudad resiliente; juntos pueden convertir la ansiedad en cuidado mutuo y confianza.” concluyó Conchita Torres @psiconchy

Para concluir el reportaje, señalamos que la incertidumbre de cuándo ocurrirá el próximo temblor mantiene al cerebro en un estado de alerta constante, provocando insomnio e irritabilidad, lo que puede generar un trauma colectivo a largo plazo como señala la especialista.
Por ello, la psicóloga recomienda validar las emociones, informarse adecuadamente y preparar planes de acción para transformar el miedo en una herramienta de prevención y cuidado mutuo.
Por: Edwin «Sports» Hevia Cadevilla / NB