En el corazón de Barquisimeto, el ruido de los motores de motocicletas se ha convertido en una banda sonora cotidiana. No es un simple capricho, sino la respuesta tangible de miles de larenses a una pregunta que todos se hacen a diario: ¿cómo me movilizo en una ciudad donde el transporte público es un desafío y llenar el tanque se ha vuelto un lujo? La moto, que antes era una opción, ahora es una necesidad. Y en este escenario, la posibilidad de financiarla está cambiando las reglas del juego.
El equipo de Noticias Barquisimeto se acercó a Kadi Motos, un concesionario que ha sabido leer la necesidad de la gente. Allí conversamos con José Rafael Piña, quien nos dio una visión clara de quiénes son los nuevos motorizados de la ciudad. «Las personas que suelen venir a la empresa son quienes utilizan la moto más que todo para trabajar, padres de familia, madres solteras, estudiantes universitarios, jóvenes que ven esto como una forma de ahorrar. La misma libertad que te brinda una moto es lo que hacemos día a día», nos comentó.

Piña enfatizó que el auge no se debe solo a la eficiencia de la moto, sino también a la accesibilidad de los planes de pago que ofrecen. «Las cuotas son bastante cómodas, porque dependiendo de la moto que busques casi siempre suele ser el mismo, entre 3 dólares o menos diarios. Esos tres dólares te los puedes ahorrar fácilmente en pasajes», explicó, destacando que el financiamiento puede extenderse hasta 20 meses.
Para quienes desean dar el paso, las opciones de inicial son variadas. Puedes llevarte tu moto con una inicial de $300, o si lo prefieres, acceder al «plan de financiamiento VIP», que requiere una inicial de $100 más el adelanto de 10 cuotas. «La moto te la llevas al instante», garantizó Piña.
Cuando se le preguntó sobre cuál es el modelo favorito de los barquisimetanos, no dudó en señalar la «Kadi 150 Classic«, describiéndola como la «perfecta para trabajar, movilizarse, además que es fácil de manejar y te estás llevando una moto nueva».




Responsabilidad y Cercanía: Un plus para el cliente
En un sector donde la confianza es clave, Kadi Motos ha puesto un fuerte énfasis en la responsabilidad. Piña fue claro al respecto: «A ninguna persona se le vende la moto con minoría de edad por temas legales». La empresa también exige que sus clientes tengan su certificado médico y licencia de conducir al día. «Esto nos habla de que tiene la capacidad de llevar la moto con cuidado y de la manera correcta para que no haya accidentes en la calle», agregó.
Además, contar con una de sus sedes principales en Barquisimeto les da una ventaja significativa. Esto les permite ofrecer una respuesta inmediata en cuanto a repuestos y garantías. «Somos el estado que va a responder más rápido por la cercanía que tenemos con la empresa. La garantía va directamente con la empresa, pero vas a salir con la moto totalmente a tu nombre y con todas las garantías».
En la carrera 19 esquina con calle 46, el equipo de Kadi Motos no solo vende un vehículo, sino que, según sus propias palabras, busca ofrecer algo más profundo: «nuestro sistema de financiamiento es exclusivo de nosotros, lo hicimos con cariño y es que queremos ofrecer más que una moto, queremos ofrecer libertad, oportunidades». Una filosofía que, en estos tiempos, resuena con fuerza en el alma de Barquisimeto.
Oriana Lorenzo/ Noticias Barquisimeto