Un día como hoy el falconiano se cubrió de gloria en el taekwondo de los JJ.OO-1992.
La historia olímpica de Venezuela ha sido alimentada de grandes hazañas, triunfos inesperados, pero también situaciones curiosas como la ocurrida en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 cuando el nacido en Punto Fijo, Arlindo Gouveia, le dio al país la segunda medalla dorada en estas lides, pero lamentablemente no contó como oficial al ser el taekwondo una disciplina de exhibición.
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Pasaron 24 años para que el deporte nacional se volviera a llenar de júbilo por una gesta como la que en México 1968 logró el boxeador cumanés Francisco “Morochito” Rodríguez, quien se colgó la única presea para el país en ese entonces. Coincidencialmente Goveia (-54kg) también obtuvo el único oro en la cita española y el primero de su especialidad.
La celebración se repitió 26 años después luego que el Comité Olímpico Internacional (COI) reconociera la presea, en un hecho de justicia que tardó mucho, pero que ratificó una victoria que significó también un éxito para Suramérica aún recordado cada 4 de agosto.
Arlindo, quien tiene raíces portuguesas, llegó a dicha contienda en una delegación criollo de 29 atletas que terminó en el puesto 34 del medallero general al cual se le agregó el metal bronceado de Adriana Carmona en +70kg del taekwondo.
Tras un ciclo olímpico perfecto, labró su oro iniciando con lauro 4-2 sobre el francés Thierry Dedegbe, en semifinales disputó una final adelantada contra el surcoreano Seo Sung-Kyo, favorito por su campeonato mundial y asiático, pero se impuso 4-3 para ir al duelo decisivo ante el representante de Indonesia, Dirc Talumewo, al cual derrotó 2-1 en el combate de su vida, manejando a la perfección la presión del rival.
Ocho días después, Arlindo arribó a su tierra con una medalla inédita que mereció el total reconocimiento del pueblo y del Gobierno Nacional que lo premió con un millón de bolívares.
Bronce de Adriana Carmona también fue reivindicado
Un día antes del oro de Goveia, una joven oriental de apenas 19 años identificada como Adriana Carmona, subió al podio del taekwondo para ser la primera venezolana con una medalla olímpica en cualquier deporte. Ese bronce en Barcelona 1992 tuvo la misma suerte hasta el 2018 cuando el COI lo estableció como oficial.
En su camino al metal (+70kg) enfrentó en cuartos de final a Aly Bychenko, una rusa que compitió bajo la bandera del COI, a la que dominó por decisión de los jueces (2-2). Posteriormente cedió 2-3 ante la representante de Nueva Zelanda, Susan Graham, terminando así como la competidora más joven de esta disciplina que participa y además gana una presea en la historia de los Juegos Olímpicos.
No hay duda que dicho podio la impulsó para lo que consiguió en el futuro. En la justa de Atenas 2004 repitió y se convirtió también en la primera atleta criolla con dos medallas olímpicas (bronce), pero con el pasar de los años se quedó como la única de su especialidad, ya que en atletismo Yulimar Rojas ganó plata en Río 2016 y oro en Tokio 2020.
Carmona dejó un legado de cuatro intervenciones en JJ.OO siendo la única venezolana del taekwondo en hacerlo. Tras su retiro, la Federación Mundial de Taekwondo, la fijó como una de las diez más laureadas de América.

Hender «Vivo» González
Con información de Líder