¡5 años esperando solución! Vecinos de la Urb. Bolívar solicitan reparación de cloacas

La situación en la Urb. Bolívar, ubicada en la parte baja de San José al norte de Barquisimeto, es alarmante. Durante aproximadamente cinco años, los habitantes de esta zona han enfrentado un problema crítico de cloacas que ha afectado su calidad de vida. Este problema no solo ha resultado incómodo, sino que también plantea serias implicaciones para la salud de sus residentes, especialmente de los más vulnerables.

“Desde que me mudé a este sector hace 5 años, esto está así”, comparte Dainerys Rivero, una de las vecinas más afectadas por esta situación. Su testimonio resuena con el sentir de muchos que han visto cómo la falta de mantenimiento y atención a las infraestructuras ha llevado a un deterioro inaceptable. La realidad es que cada día que pasa, el problema se torna más grave: “Cada día es más fuerte y peor cuando se desborda, el olor es insoportable”, agrega con visible frustración.

Los testimonios de los vecinos revelan un patrón preocupante: la acumulación de aguas negras y la falta de respuesta por parte de las autoridades competentes. Esto no solo afecta la higiene del lugar, sino que también se convierte en un foco de enfermedades.

A pesar de los esfuerzos realizados por los residentes, como las numerosas visitas a Hidrolara, la respuesta ha sido casi nula. “Hemos ido a Hidrolara muchísimas veces y no nos dan respuesta. Por eso, hacemos el llamado al Gobernador y al Alcalde para que nos solucionen lo más pronto posible”, afirma Rivero.

Los problemas de cloacas no solo son un inconveniente; son un riesgo tangible para la salud pública. “Hay muchos niños pequeños y especiales en el sector, muchos vecinos también tienen infecciones respiratorias”, advierte Rivero, quien no puede contener su preocupación por la salud de sus seres queridos. El agua empozada no solo atrae plagas, sino que también propaga enfermedades que pueden afectar a personas de todas las edades.

La situación actual en la Urb. Bolívar es un claro ejemplo de cómo un problema de infraestructura puede evolucionar a una crisis de salud pública si no se aborda con urgencia. La salud y bienestar de sus habitantes dependen de ello.

Carla Martínez / Noticias Barquisimeto